Los inmunoensayos de flujo lateral (IFL) están basados en el uso de membranas de nitrocelulosa como soporte de las reacciones inmunológicas. Son pruebas utilizadas para detectar la presencia o ausencia de un analito de interés biotecnológico en una muestra líquida.

Al contrario que los inmunoensayos tradicionales que conllevan el uso de placas multipocillos, un elevado coste, procedimientos complicados de lavado y de preparación de la muestra, largos tiempos de detección etc., los inmunoensayos de flujo lateral son portátiles, rápidos y fáciles de utilizar, lo que permite que el análisis se pueda realizar de manera deslocalizada (dispositivos Point of Care, PoC).

Su uso está ampliamente extendido en el sector de la salud humana. Aunque actualmente, dada su versatilidad, su participación es cada vez más importante en el sector farmacéutico, medioambiental y agroalimentario entre otros. Pero, ¿cómo funcionan las pruebas de flujo lateral?

 

Funcionamiento de las pruebas de flujo lateral (lateral flow)

Las pruebas de flujo lateral (lateral flow) están formadas por una serie de membranas de material poroso que se encuentran superpuestas entre sí y adheridas a una tarjeta de soporte o backing card.

La prueba comienza con la adición de la muestra en la almohadilla de muestra (sample pad) donde es tratada para que sea compatible con el resto del test.

La muestra tratada migra desde la almohadilla de muestra, a la almohadilla del conjugado (conjugate pad) que contiene el conjugado inmovilizado. Generalmente, la conjugación se realiza con partículas de oro coloidal, aunque también puede realizarse con partículas de latex coloreadas, paramagnéticas o fluorescentes entre otras.

La muestra vuelve a movilizar el conjugado e interactúa con el analito cuando ambos migran a la siguiente sección de la tira, que es la zona de captura. En la zona de captura se han inmovilizado otros componentes biológicos que se han depositado en líneas específicas de la membrana donde sirven para capturar el analito y el conjugado a medida que migran por la(s) línea(s) de test (test line). Lo podremos detectar de forma visual con la aparición de una banda coloreada. Asimismo, en la migración también suelen participar moléculas control que en la zona de captura se transforman en una banda coloreada en la línea de control (control line) que indica que la prueba es válida.

El exceso de reactivos pasa por la zona de captura hasta llegar a la almohadilla absorbente.

Fuente: Lateral Flow Assay. Development Guide. v 1.4 · Published July, 2018

 

Entre las pruebas de flujo lateral (lateral flow) más conocidas se encuentran, los test de embarazo o, en la actualidad, el test rápido de detección de anticuerpos frente al SARS-CoV-2.

 

Funcionamiento del test rápido de detección de anticuerpos frente al SARS-CoV-2.

En este caso, el test consiste en una tira de nitrocelulosa con dos líneas (IgG e IgM) y una línea de control.

Cuando se añade un volumen adecuado de muestra (sangre/suero/ plasma) seguido por el buffer de ensayo al pocillo de muestra (S), la muestra se difunde por capilaridad por la tira del test. Si en la muestra hay presentes anticuerpos IgG o IgM frente a SARS-CoV-2, interactuarán con los conjugados SARS-CoV-2 para formar el complejo antígeno-anticuerpo. A medida que el complejo continúa migrando a través de la membrana de nitrocelulosa, es capturado por los anticuerpos inmovilizados correspondientes (anti-IgM y/o anti-IgG humanas) formando una línea de color burdeos (línea IgM o IgG). Esto indica un resultado positivo para anticuerpos IgM y/o IgG frente a SARSCoV-2.

El test tiene además una línea de control, que debería aparecer con independencia del desarrollo del color en cualquiera de las líneas del test. En caso contrario, el resultado de la prueba no es válido y la muestra debe volver a someterse a ensayo con otro casete de test.

 

Dado el método de detección óptica empleada, las pruebas de flujo lateral (lateral flow), son en su mayoría pruebas cualitativas. Muchos de los resultados se basan en la interpretación del usuario. Éste compara el color obtenido en la línea de test con los colores que figuran en la “tarjeta de Color” proporcionada con el kit.

Sin embargo, para las pruebas de flujo lateral semicuantitativas o cuantitativas se están desarrollando nuevos lectores que permiten medir la intensidad de la banda. Estos dispositivos de sobremesa o portátiles están adquiriendo fuerza y correlacionan la concentración del analito en la muestra con esta intensidad de la banda.

 

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