La vacunación es de vital importancia para protegernos frente al virus y, en la situación actual, mejorar la situación de la pandemia. Nos ayudan a generar inmunidad frente a las distintas enfermedades.

Las vacunas funcionan introduciendo, de alguna forma, el elemento contra el que queremos que nuestro cuerpo genere inmunidad y, así, cuando entremos en contacto con ese elemento, el cuerpo se encuentre más preparado para combatirlo.

Los beneficios de las vacunas son infinitamente superiores a los problemas que estas puedan ocasionar, por eso, es muy importante vacunarse para ayudar al organismo a generar protección.

Para combatir el coronavirus, se han generado diferentes vacunas que funcionan mediante diferentes mecanismos. ¿Conoces las diferencias entre las distintas vacunas frente el SARS-CoV-2 que hay en la actualidad en el mercado?

 

Diferencias entre las distintas vacunas disponibles en el mercado

En la actualidad hay dos tipos principales de vacunas autorizadas, las cuales son seguras y eficaces:

• Vacunas ARNm: Estas vacunas contienen el material genético del virus que causa la COVID-19. Este material genético promueve que nuestras células generen una proteína a partir de este material genético (que no es perjudicial) y es exclusiva del SARS-CoV-2. Una vez creada esta proteína, se realizan copias de la misma que el cuerpo reconoce como extrañas y pone en marcha la maquinaria inmunitaria para combatirlas generando linfocitos T y linfocitos B. Estos linfocitos nos ayudarán a combatir el virus en el caso de exponernos a él en un futuro.

Este es el caso de vacunas como la de Pfizer-BioNTech, Moderna o, la próxima en salir al mercado, CureVac.

• Vacunas de vectores virales: Un vector viral es como un “caballo de Troya” que transporta el fragmento del virus contra el que queremos generar inmunidad. En este tipo de vacunas se inocula un virus diferente al de la COVID-19, en cuyo interior, el material genético del mismo se ha modificado para que incluya material genético del SARS-CoV-2. Una vez que se libera el material genético del virus, nuestro cuerpo genera la proteína del virus a partir del mismo y sus copias correspondientes. Estas copias ponen en marcha la maquinaria inmunitaria necesaria, generando linfocitos T y linfocitos B, que nos ayudarán a combatir la enfermedad.

En este grupo se encuentran las vacunas de Janssen o Astrazeneca.

En ninguno de estos casos se inocula el virus del SARS-CoV-2 en un estado activo, por lo que, este tipo de vacunas no puede producir la enfermedad. El cuerpo, al detectar una sustancia externa y poner en marcha el sistema inmune, puede reaccionar y, por tanto, se pueden producir posibles efectos secundarios.

Por lo que, las diferencias entre las distintas vacunas disponibles se basan fundamentalmente en el mecanismo de entrada del material genético al organismo.

 

¿Cómo funcionan las vacunas? ¿Se puede medir su eficacia?

En conclusión, como resumen del proceso de forma resumida y sencilla ocurrirían estos pasos:

1. Se introduce el material genético del virus mediante diferentes mecanismos.
2. Nuestro cuerpo genera una proteína a partir del material genético inoculado, que es específica del virus, la proteína S.
3. Se generan múltiples copias de esta proteína.
4. Nuestro organismo pone en marcha la maquinaria inmunológica contra la proteína, generando los linfocitos antes comentados.
5. Los linfocitos B, a su vez, generan anticuerpos frente a esa proteína. Estos anticuerpos nos ayudarán a estar protegidos frente al virus en el caso de contacto con el mismo.

Cuando se produce una infección por coronavirus, el cuerpo genera anticuerpos de todo tipo frente a las diferentes proteínas que se encuentran en la estructura del virus (proteína N, proteína M proteína E y proteína S). Sin embargo, con las vacunas sólo se generan anticuerpos frente a la proteína S.

Fuente: Bases Genéticas y Moleculares del COVID-19 (SARS-CoV-2). Mecanismos de Patogénesis y de Respuesta Inmune. Gabriel Pastrian-Soto. (Adaptado de Yuefei et al.). 

 

En este sentido, existen numerosos test serológicos en el mercado que permiten la detección de anticuerpos frente al SARS-CoV-2, pero la mayoría de ellos detectan la proteína N del virus, por lo que no servirían para poder evaluar la eficacia de las vacunas.

Sin embargo, en Biolan Health hemos desarrollado un test serológico que permite detectar anticuerpos neutralizantes que son aquellos anticuerpos dirigidos contra la región de unión al receptor RBD (por sus siglas en inglés de Receptor Binding Domain) de la proteína S. Este región funciona como “llave” de entrada del virus a la célula humana. Por lo que, al detectar los anticuerpos específicos contra la proteína que generan las vacunas, nuestro test constituye una herramienta ideal para evaluar la eficacia de las vacunas.

 

 

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